En el mes de agosto se cumplen 486 años de la primera recalada de una nave española en la bahía de Quintero, a pesar que esta fecha ofrece en la actualidad discrepancias en torno al día exacto de esta visita, cuál fue la nave que arribó a las costas de lo que hoy es Quintero, y quién fue el piloto que la gobernaba.
La Municipalidad de Quintero, siguiendo la tradición, reconoció mediante decreto alcaldicio No1469 del 2 de mayo de 2017, la visita de Alonso Quintero al mando de la nao “Santiaguillo” que habría visitado esta ensenada el 15 de agosto en 1536. La carabela era parte de las huestes de la conquista de las tierras al sur de Perú realizada por el Adelantado Don Diego de Almagro, y tenía como misión proveer a las tropas españolas de alimentos, vestuario y fierro para el herraje de las cabalgaduras.
Previo al decreto el Concejo Municipal de la época declaró la fecha como el aniversario oficial de la ciudad, independiente de la conmemoración de la creación de Quintero como puerto mayor el 24 de noviembre de 1865, que se sigue celebrando. De este modo, el decreto alcaldicio puso en valor la tradición que destaca que la comarca comienza a aparecer en las cartas de navegación y los mapas españoles como un verdadero secreto de guerra por ser nuevos territorios sumados al imperio, ya que los pilotos debían plasmar en documentos las costas desconocidas para los navegantes europeos.
La encargada de Patrimonio, Eugenia Gaete, explica que no fue fácil recuperar la fecha porque algunos historiadores, como Diego Barros Arana, fundamentan que la fecha del descubrimiento fue en mayo, mientras Benjamín Vicuña Mackenna lo ubica en el mes de agosto. Por su parte, el historiador Christian Gazmuri, tomó el antecedente del cronista de la época Gonzalo Fernández de Oviedo quien menciona que la expedición de Almagro había partido desde la ciudad del Cuzco en diciembre de 1535, para llegar ocho meses después a lo que hoy conocemos como valle de Quillota.
Mientras que en el artículo “La componente marítima de la expedición de Almagro” del historiador Carlos Aguirre, de la Academia de Historia Naval y Marítima de Chile, se afirma que Don Diego de Almagro al salir de Cuzco ordenó que navegaran al sur tres pequeños barcos, el “Santiago”, el “San Cristóbal” y el “San Pedro”, que la “Santiago” zarpó al mando de Alonso Quintero, pero que solo pudo llegar hasta las islas Chincha debido a su mal estado y que en mayo de 1536 este marino español se habría trasladado a Portobelo para luego dirigirse a España, y que fue la “San Cristóbal”, la que recorrería parte de la costa central de Chile, ingresando en la primera quincena de junio a una caleta próxima al valle de Aconcagua. Esta nave tenía a un maestre llamado Cristóbal de Quintero, por lo que sería probable que a él se deba el nombre de la península y la bahía, agrega además que Almagro recibió la visita de uno de los tripulantes de la nave “San Pedro” a la que llamaban “Santiaguillo” por el parecido con la “Santiago”, en un caserío del valle de Aconcagua el día de la Asunción de la Virgen.
Otra afirmación proviene de 1874, de parte del historiador Francisco Solano Astaburuaga en la introducción de “Quintero, su estado actual y su porvenir” de Benjamín Vicuña Mackenna al decir que fue el piloto Alonso Quintero en la nave “Santiaguillo” quien habría descubierto la bahía de Quintero a fines de 1536, sin dar ni mes ni día.
La nave no habría permanecido en la actual bahía de Quintero más de una semana a la espera de encontrarse con las huestes de Almagro, y como eso no ocurrió zarparon hacia el sur hasta llegar a la bahía que hoy conocemos como Valparaíso, donde tuvieron contacto con el capitán del Adelantado, Juan de Saavedra, a principios de septiembre, para enterarse que debían volver a Perú.